Podríamos definir el touch rugby como una modalidad del rugby que elimina el contacto. Ésta es precisamente una de las bases del deporte y lo que permite que sea practicado de forma mixta. A diferencia del rugby, no existen las melés, ni puede placarse y la esencia del juego se basa en la rapidez, la agilidad y sobretodo la estrategia y el conocimiento de las reglas del juego.
Con el rugby, comparte, las normas del fuera de juego, el balón y sobretodo el espíritu de equipo. Todo ello lo hacen un deporte ideal para practicarse desde la infancia hasta la edad adulta. Sus múltiples categorías: infantiles, alevines, junior, juveniles, senior, veteranos y tanto masculinas, femeninas o mixtas, lo convierten en un deporte que puede ser enfocado desde una perspectiva altamente competitiva, pero también desde un punto de vista lúdico, social y familiar.
El touch rugby, nace como una alternativa al rugby league, aunque muy pronto el dinamismo de esta disciplina, le otorga personalidad propia y recluta legiones de seguidores que lo practican de forma exclusiva. En países como Nueva Zelanda, Australia, Inglaterra o Suráfrica, está tan popularizado que incluso los colegios tienen sus propios equipos de touch rugby, con lo que los niños pueden practicarlo como disciplina deportiva extraescolar.
En nuestro país se está comenzando a introducir con fuerza, y en los últimos años, son cada vez más los equipos que tímidamente se van incluyendo en esta gran familia que constituye el Touch Rugby.
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